El diseño y construcción de esta vivienda campestre de 270 m² en Valle del Este es un excelente ejemplo de integración con el entorno natural. Situada en un terreno de topografía plana colindante con la quebrada “La Pereira”, esta vivienda campestre presenta dos volúmenes principales con cubiertas a dos aguas, conectados por una circulación central que crea dos patios alrededor de los cuales se organiza el espacio. Esta disposición permite que las áreas sociales y las alcobas permanezcan independientes, mientras ambas se orientan hacia el río, aprovechando las vistas naturales.
Además, se incorporaron volúmenes más bajos con cubiertas planas que contrastan con la verticalidad de los volúmenes principales. Esta composición volumétrica no solo es visualmente interesante, sino que también contribuye a la integración de la vivienda campestre con el paisaje circundante. La circulación principal, al unir los volúmenes, proporciona una sensación de caminar entre dos patios, borrando la línea entre el interior y el exterior.
Materialidad y Construcción en una Vivienda Campestre
En términos de diseño y construcción, la vivienda campestre está soportada por una estructura metálica, lo que asegura robustez y durabilidad. Los volúmenes principales presentan cubiertas de teja tipo “shingle” que descienden para convertirse en cerramientos verticales, creando una lectura homogénea del volumen. Esta integración de cubierta y cerramiento vertical se convierte en un solo elemento estético.
